Las mallas antigranizo para la protección de cultivos frutales y hortícolas es una herramienta eficaz para asegurar tanto las cosechas como la salud de las plantas.
Las cosechas porque un pedrisco puntual puede dañarlas y depreciar su calidad. Y la salud de las plantas, porque cuando el granizo es grueso, puede acabar con la vida de la planta y en el caso de frutales, dañarlos hasta el extremo de comprometer su viabilidad durante varios años hasta su recuperación. En todos los casos, los daños y pérdidas son enormes.
Inversión en mallas antipedrisco para la protección de cultivos.
Estas mallas antigranizo para la protección de cultivos se emplean sobre todo en aquellas zonas agrícolas cuyo microclima acostumbra a que se produzcan granizadas o pedriscos, dos formas de denominarlas popularmente, con cierta periodicidad en el tiempo.
En estos casos, estamos ante una inversión con beneficios en diferentes ámbitos. Uno de ellos es el ya referido: la salud de la planta y evitar daños en las cosechas ante casos de granizadas.
Pero también hay algunos más. Un cultivo protegido con mallas antipedriscos asegura la cosecha, por lo que la venta de la cosecha puede anticiparse por la garantía de que no sufrirá daños derivados de este agente meteorológico.
La calidad de vida del agricultor también es un factor a tener en cuenta, ya que la famosa frase de tener «la vista mirando siempre el cielo«, no es tan condicionante en el día a día.
Y no podemos olvidar un factor también muy importante, como es la mejora de la calidad de los frutos. Estas mallas, además, tamizan la luz lo suficiente para que los rayos de sol no incidan de forma tan potente sobre la piel de los frutos. Manzanos, perales, nectarinos, nísperos, viñedos, almendros, olivares, ciruelo, nectarinos, naranjos, pistacheros, etc. son frutales en la que el color y uniformidad de sus frutos son valores comerciales que se tienen en cuenta a la hora de establecer su precio de compra. En el caso de frutos secos, evitando el desprendimiento del fruto.
Mallas antigranizo versátiles.
Aunque este artículo se centra en las mallas antigranizo para la protección de cultivos, estas son versátiles y tienen otros campos de aplicación, como por ejemplo en concesionarios con un parque de vehículos al aire libre, aparcamientos particulares en segundas residencias o casa de campo, paneles solares, etc.
En todos los casos, estas mallas antipedriscos necesitan una estructura sobre las cuales extenderse por encima de los cultivos. De igual forma, son instalaciones que, a lo largo del año, permitan extender y recoger la malla a voluntad.
Por otra parte, estas mallas, una vez extendidas, siempre dejan zonas de alivio entre filas para que el granizo caído, pueda caer al suelo fuera de la línea de cultivo y evite que su peso pueda dañar la infraestructura que lo sustenta.
Calidad y venta de las mallas antigranizo.
La calidad de la malla es fundamental para la durabilidad de la inversión. Las mallas agrícolas antigranizo Nutriflor están compuestas por las referencias P80 en color negro y la misma P80, P65 y P100 en incoloro.
Las incoloras generan un porcentaje de sombra de tan solo el 18%. Todas ellas están fabricadas con material 100% polietileno aditivado con protección anti rallos ultravioleta.
En cuanto a su presentación de ventas, es en bobinas individuales envueltas en plástico, en rollos de 1,5, 2, 3, 4, 6 y 8 metros de ancho x 100 de largo. Con este catálogo disponible, se pueden abordar desde pequeñas parcelas a grandes extensiones, como también, adaptables a diferentes marcos de plantación.
En la venta de estas mallas antigranizo, también se debe tener en cuenta sus accesorios de sujeción de mallas, para utilizar los adecuados de cara a mantener su vida útil el mayor tiempo posible.